miércoles, 30 de noviembre de 2011

Anacleto Giron y los estudiantes de Santiago

Con sus cananas cruzadas al pecho, su uniforme, color kaki amarillento polainas, y su  sombrero tejano, ostentando en él una pequeña estampa de la virgen de Guadalupe, o una pequeña Cinta tricolor, arribó el ejército maderista a la ciudad de Ures, el 21 Marzo de 1911.
Aquello fue tan sorpresivo que el poblado se encontraba en sus labores cotidianas. El Colegio de Varones, cuyo Director era el Profesor José Lafontaine, fue notificado de lo que estaba aconteciendo en esos momentos y como medida precautoria a sus alumnos, suspendió las labores educativas, y envió a los alumnos hacia sus hogares.
Entre estos se encontraban diez estudiantes de la comisaría de Santiago de Ures: Ángel y Francisco Atando, José, Antonio, y Domingo Bracamonte, Ignacio Canizales, Jesús María Trujillo, Ramón A. Real, Juan Pérez y Agustín Carrazco, todos ellos jóvenes, menos el último que tenía diez años de edad. Estos alarmados por lo que estaba aconteciendo, preocupados por la angustia que con toda seguridad prevalecía en sus hogares, probaron a llegar lo más rápido posible. Un grupo de soldados maderitas que le tenía bloqueado el camino que conduce a Santiago, les privó  el paso, Probaron por el callejón de Anita Sicre, también estaba bloqueado, se fueron por el callejón de las colmenas, con igual resultado, por él arroyo del rancho, por la tierra del molinito comprobando que por donde quiera era el mismo problema.
Para entonces ya eran las cinco de la tarde, y resultaba cada vez  más imposible que  el grupo de alumnos retornara a sus hogares. Desesperados, hambrientos y sin saber qué hacer se reunieron todos, para buscar solución a su problema, entonces el más pequeño de todos propuso un plan que resultó muy arriesgado a todos, pero confiando en la seguridad con que éste planeaba todo, y además, él lo iba a hacer, nada más pedía su compañía; aceptaron de común acuerdo, y así, el grupo capitaneado por el pequeño enfiló con rumbo a la corrección. Un soldado les impidió el paso e inquirió el motivo de su presencia en aquel lugar. El pequeño se adelantó y pronunció estas palabras: "Quiero hablar con el que manda todo aquí", los soldados rieron de la ocurrencia de aquel pequeño, y preguntaron en son de guasa para qué quería al jefe, el niño muy serio y sin inmutarse, contestó, llévenme a donde se encuentra o dígame cómo llego a él.
Pronto se encontró frente a Anacleto Girón, y al ser interrogado por éste, contestó, somos estudiantes del Colegio de Varones y vivimos en la Comisaría de Santiago situado al otro lado del río. Desde la mañana hemos probado por regresar a nuestros hogares por callejones y milpas y hemos sido devueltos, pronto anochecerá, no tenemos dónde dormir, tampoco hemos comido en todo el día. ¿Qué vamos a hacer? Ayúdenos usted.
Inmediatamente fue oída aquella petición. Un grupo de soldados maderistas al mando de Juan Antonio García los acompañó hasta sus, hogares, donde ya como ellos intuían privaba la angustia y desesperación provocadas por su tardanza.
Tiempo después de estos acontecimientos por dondequiera se oía cantar a grito abierto el corrido de San Rafael. Este fue compuesto por los mismos soldados que vivieron lo acontecido en aquellos días aciagos, he aquí uno de los tantos versos del mencionado corrido:
El 27 de Marzo
que ya yo ni me acordaba
Empezaron a tirar
en el Rancho de La Odenava
Arriba, arriba muchachos
dice Anacleto Girón
vamos a tirarles fuerte
a las fuerzas de Barrón
etc., etc., etc.
Este corrido tenía muchos versos más y era cantado con una música preciosa y se escuchaba por todas partes: en los caminos, en reuniones, y aún en los campos de labranza mientras el trabajador guiaba su arado

3 comentarios:

  1. Soy bisnieto de Anacleto Giron y nunca habia visto el corrido que mencionas en tu nota apreciaria mucho lo pudieses publicar completo o cualquier otra informacion adicional que pudieses tener, de antemano muchas gracias!!

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    1. Citen la fuente de la escritora Lola Real ella la autora del libro Casos y cosas de mi tierra

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  2. Estoy por editar segundo libro a la Atenas de Sonora

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